Cap I

Suena el teléfono, dubitativo decide contestar. -Hola- dice con un tono cordial pero ansioso. -Deja a mi familia en paz- le dice la voz del teléfono.-¿De que familia me habla?¿Quien es usted?- Contesta tratando de disimular su nerviosismo. Él ya sabia con quien estaba hablando, algo se lo había dicho, se lo había advertido. Esa maldita voz en su cabeza, que es como un sexto sentido, como un don y una maldición. Esa voz que se hacia llamar Sacer. Que estaba con el desde aquella noche. -Vos sabes bien quien soy, sabes donde vivo. No quiero verte mas cerca de mi hija ni de mi esposa.- Le dijo con tono amenazador la voz. Aunque ese tono era amenazador, era aterrorizante, tenia algo que lo tranquilizaba, tenia ese aire familiar. Como el reto de una madre, o un padre. Da miedo pero sabes hasta donde pueden llegar. Esa tranquilidad era lo más escalofriante, el sentir que parecía que conocía esa voz. La sensacion de haber compartido muchas cosas juntos, viajes, risas y llantos. Eso era lo que realmente lo asusto. -No se quien es usted- dijo tratando de parecer serio, ya todo parecía una partida de poker, donde cualquier duda dejaba en descubierto la jugada. -Si sabes quien soy yo, te vi. Se donde vivis. Te vi. Ya no mientas. Tengo un arma, y no voy a dudar. No respondere de mis actos. Te voy a matar si lo haces otra vez. Lo juro. Conoceras la ira de Dios si te atreves otra vez.- Le dijo escupiendo cada palabra con una ira, con una ira fria y bien direccionada. Sabiendo que hacer en cada paso. Parecia tener todo calculado. Entonces él decidió jugar una ficha, su única ficha. No tenia nada, no tenia nada que perder, tal vez podria sacar algo de ahi. Nunca tuvo problemas en mentir, no empezaria ahora. -No me alejare nunca de tu familia, los tengo cerca. Mas cerca de lo que vos crees. Estoy tan cerca que tendrias que sentirme. Deberías haber pensado dos veces antes de llamarme, nunca te metas en la boca del lobo... Nunca te metas en la boca del lobo si no sabes si esta muerto, tal vez podría morderte, tal vez podría matarte, o tal vez podría seguirte hasta tu nido, y lastimar a tu familia...- Lo amenazo tratando de sonar lo mas real posible. El silencio apareció de repente y la habitación empezó a llenarse de un aire denso, y le dificultaba respirar. Parecia que los pulmones estaban apretados por una prensa.-Alejate de Sofia y de Luciana- grito esa voz en el teléfono, que era la misma pero parecia otra, ya no tenia esa seguridad, ya no mostraba ese lado tenebroso. Pero esos dos nombre fueron dos tiros que entraron en su pecho, justo en su corazón. -¡Alejate de mi esposa y de mi hija!¡Soy capaz de cualquier cosa por ellas!¡Si te acercas, prometo que te seguiré hasta el fin del mundo, no existirá un lugar donde te puedas esconder!¡Si te acercas te juro por mi vida que vas a preferir que te maten a que te encuentre!¡Mantenete lejos de mi familia hijo de puta!- y corto.
Aunque la amenaza resonaba en su cabeza, Sacer le recordó esos dos nombre, Sofia y Luciana. El corazón le dio un vuelco, no podía ser. -Es imposible- pensó. -No, esto es real, demasido real. Yo te lo advertí- Le dijo la voz en su cabeza, una y otra y otra vez....